lunes, 25 de febrero de 2019

¿Cómo ahorrar?

Esta vez hablaremos de cómo ahorrar, ¿qué cosa? ¿Con la situación como está? Sí, cómo ahorrar en estos tiempos. Es más, cómo ahorrar ganando poco. ¿Cómo? Pero si ahorrar en sí mismo es difícil, ganando poco es imposible, ni que fuera mago. Cómo voy a ahorrar si no me alcanza para vivir o en el mejor de los casos lo que gano me alcanza con las justas…

Pues comencemos por definir el ahorro. El ahorro es lo que gano menos lo que gasto. Ese dinero sería nuestro ahorro o, en todo caso, nuestra capacidad de ahorrar. Entonces ya tenemos una primera definición: Ahorro = Ingreso - Gasto. Si tenemos un ingreso de 1,000 y gastamos 900, nuestro ahorro es 100.

Pero… Si nos queda 100 es probable que nos lo gastemos, ¿verdad? ¿Sí o no? La práctica de ahorrar es un hábito que debemos cultivar, contra lo que cualquiera pudiera decirnos. Así que para comenzar debemos plantearnos metas de ahorro realistas. Por ejemplo, de los 1000 que gano… ¿Qué tal si ahorro 50? Ok, entonces tenemos 50 de ahorro y los otros 50 que llamaremos pequeño fondo para otros gastos.

Pero incluso en ese momento la cosa no es tan sencilla porque todo lo tendremos en nuestra cuenta de sueldo. ¿Cómo? Sí, el problema es que tendremos los 1000 siempre a disposición en nuestra cuenta, a un clic de distancia si tenemos la App del banco en nuestro cel o a un pago con tarjeta de nuestra cuenta.

¿Qué debemos hacer? Hay una práctica que nos podría ayudar. ¿Cuál es? Es una que muchos llaman “págate a ti mismo”.  ¿Cómo? Así como lo escuchan. Lo podemos hacer de la siguiente manera, pero necesitamos dos cuentas y si es en bancos diferentes mejor. El pago llega a nuestra cuenta de sueldo e indicamos al banco que nos transfiera el dinero que queremos ahorrar a la otra cuenta, así que nos pagamos 950 y depositamos en la otra cuenta y/o banco 50. La idea es tener esos 50 que decidimos ahorrar fuera de nuestra vista y alcance. ¿Por qué es mejor en otro banco? Porque de esa manera la cuenta ahorradora tendrá una tarjeta específica con la cual podremos acceder a ella y si no bajamos la App del banco, mejor. La cosa es olvidarnos que existe ese dinero y guardar la tarjeta que nos de el banco.

Así podremos ahorrar de una manera constante, cierto que ahorraremos poco, pero por algo se comienza porque como decíamos el ahorrar es un hábito. Por ello no debemos desanimarnos si es que no logramos hacerlo de la manera que pensamos en un principio.



El primer paso para ahorrar es tomar la decisión de hacerlo, pero esto por sí mismo no basta. ¿Cómo que no? No, por sí mismo no basta y no basta porque nuestro ahorro no tiene una justificación, no tiene un objetivo. Y esto es lógico, ¿por qué?


Continuemos con el ejemplo, voy a ahorrar 50 todos los meses para, digamos, para irme de viaje, para comprarme una casa o un carro, pagarme la universidad, o, si tenemos hijos, para crear un fondo para su educación. El poner un propósito a nuestro ahorro hace que lo pensemos dos veces antes de gastarnos lo ahorrado e incluso hará que aumentemos las cantidades de ahorro mensual.


¿Qué otras maneras tenemos para ahorrar? Hay gastos que uno ni se da cuenta que hace. Por ejemplo, a media mañana la galleta con la gaseosa, hagamos matemáticas sencillas: un paquete de galletas 50 céntimos y una bebida chica 1 sol, tenemos 1.5 soles diarios, si trabajamos de lunes a viernes en un mes tendremos 33 soles, anualmente son 396 soles. Mira tú…


Otro gasto hormiga, si vivimos a 10 o 12 cuadras del trabajo… ¿Por qué no caminar? A china la ida y a china el regreso, 1 sol diario, mensualmente son 22 soles , anualmente 264… Y en este punto no hay disculpas. Ok, vivo muy lejos. Tomo un bus que me deja a 10 o a 8 cuadras del trabajo, camino. En Lima tenemos una ventaja, nunca llueve. Así que podemos caminar tranquilos que no nos mojaremos, claro, a menos que se rompa una cañería de Sedapal, pero esa es otro historia.


Otra manera de ahorro. Después de almorzar, el café dos soles, mensual ahorraremos 44 soles, anual 528 soles. Y así podemos seguir, con los cigarrillos, el maquillaje, la peluquería, etc, pero hagamos un cálculo de cuánto podríamos haber ahorrado: 50 soles mensuales de nuestros sueldos hacen 600 soles anuales, el ahorro en las galletas más la gaseosa 396, más el ahorro por caminar 264, más el café 528. Todo suma: 1788. Esos gastos son los llamados “gastos hormiga”, son chiquitos, pasan desapercibidos y uno comprende su real dimensión cuando se queda sin dinero en los bolsillos.


Importante es presupuestar nuestros gastos necesarios e innecesarios. Si vamos a hacer las compras semanales, podemos hacerlas en los mercados y en los supermercados. Uno no excluye al otro, con el Internet podemos estar al tanto de los precios en los supermercados. El comparar el bueno. Por ejemplo, las papas, hay más variedad en los mercados y los precios son mejores. En cambio en los supermercados muchas veces son más baratos los productos envasados.


Un paso importante, es no enduedarte. Casi todos tenemos una tarjeta de crédito, pero cuidado, no todo lo que brilla es oro. Una ventaja de las tarjetas de crédito es el pago diferido a fin de mes, o el pago en cuotas de un bien o servicio para el cual no tenemos el suficiente dinero para comprar al contado, por ejemplo una computadora. No todo lo que brilla es oro porque igual tendremos que pagar lo que compremos con esa tarjeta. Debemos tener muy claro qué es lo que compramos con tarjeta y qué al contado. La tarjeta de crédito muchas veces hace que gastemos más de lo que tenemos para gastar en el mes. Por ello, siempre es bueno apuntar nuestras compras, todas. Apuntar las compras en efectivo y las compras con tarjeta de crédito.


¿Es bueno tener tarjeta de crédito? Sí, claro. Y es bueno porque nos hace tener una historia crediticia. Una historia de buen pagador hará que cuando requiramos un crédito para comprar un auto o una casa, el banco nos quiera prestar porque somos cumplidos en nuestros pagos. Otra cosa, no es bueno pagar el mínimo que sale en los estados de cuenta de las tarjetas de crédito porque ese monto no incluye nada del monto que adeudamos, solo los intereses. Además no debemos olvidar que los intereses de las tarjetas de créditos son altísimos y peor si hablamos de los créditos de consumo, estos superan fácilmente el 100% anual.


También podemos ahorrar reduciendo por ejemplo algunos lujos. Por ejemplo, si nos gusta ir al cine a las salas más caras, pues vayamos a las más baratas, y no solo eso podemos ir ya comidos para no comprar la canchita cinemera que cuesta un ojo de la cara y su bebida más. En todo caso, podemos pagar por un servicio de video streaming como Netflix que, muy a pesar de la velocidad del Internet acá en Perú, cuya resolución y velocidad es bastante bueno. Si es que la casa o departamento donde vivimos no es nuestro, podemos buscar un sitio donde paguemos menos, algo que esté dentro de nuestro presupuesto, que nos permita ahorrar y tener un mejor nivel de vida y, sobre todo, paz monetaria para llegar tranquilos a fin de mes. Dejar de ir a restaurantes caros también puede ser un ahorra importante.


Un gasto que pocos toman en cuenta es el de la luz. La luz es cara, hace muchos años dejó de estar subsidiada. Así que si tienes cocina eléctrica, cambiala por una de gas, verás el cambio en tu recibo mensual de luz. Si tienes una terma eléctrica, enciéndela media hora antes que la uses y luego apágala, no la dejes encendida todo el día.


Una manera de comenzar a ahorrar sería crear un fondo de emergencia, para cubrir enfermedades, visitas al médico, al dentista, reparaciones de emergencia en la casa.


El ahorro puede ser una buena manera de unir a la familia porque todos se involucran en alcanzar un objetivo, ya sea los estudios universitarios, algún viaje, la compra de una casa o un auto, la compra periódica de equipos para la casa, etc.
Como les dijimos al principio, el ahorro es un hábito y los hábitos se crean. Se dice que basta que uno haga algo por 21 días para que quede como hábito, así que… ¿Qué esperamos para comenzar a ahorrar?